Año: 1.963
Modelo: STUDEBAKER Avanti
Peculiaridades:  
Fabricante: SIGNATURE Refª: 18101T Escala: 1/18
Ficha:  


IMÁGENES DEL COCHE REAL



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A principios de los años 60, Studebaker necesitaba rápidamente un nuevo diseño, y se puso en contacto con el diseñador francés Raymond Loewy, padre de las líneas de la botella de Cocacola.

En tan solo seis semanas, con maratonianas jornadas de dieciséis horas diarias, Loewy y su equipo, tuvieron lista la maqueta de barro.

Como la marca americana no tuvo tiempo literal de preparar un chasis adecuado, se le dotó con el del modelo Lark, y para motorizarlo, se volvió a usar material ya disponible, como el motor 289 de 8 cilindros, que aunque viejo de diseño, era muy robusto, y tras algunos retoques, se le conseguían extraer 240 hp.

Para los que pedíanmás potencia y prestaciones, se le podía instalar un compresor Pastón, cono lo cual la potencia aumentaba a 290 hp.

El deportivo en cuestión fue presentado en la primavera de 1962, y a nediados de año se empezó su fabricación, y hasta finales de ese mismo año se produjeron 3.834 unidades.

El año siguiente solo salieron de la cadena de montaje 809 coches, entrando Studebaker en una fuerte crisis, declarando suspensión de pagos. A todo esto, Nate Altman, el más antiguo representante de la marca, creyendo en las perspectivas del modelo, intentó salvarlo, y para ello se puso en contacto con las diferentes empresas automovilísticas del país, con el resultado de que nadie estaba intertesado el el Avanti. Con lo que no le quedó más remedio, que adquirir todas las partes del coche, el diseño, la marca registrada, dos naves industriales, más una línea de producción.

Tras un año de pausa, en 1965, salió el Avanti II, igual de línea exterior, pero ahora el motor en vez de ser propio, proviene del Corvette, dando 300 hp, y colocando al deportivo a 100 Km/h en 7,5 segundos.

Aunque en un principio se intentó que el Avanti fuera un competidor del Corvette, lo cierto es que al poco de fabricarlo, al motor se le rebajó la potencia hasta los 170 hp., y combinando esta drástica bajada de fuerza, un interior muy cuidado, una calidad de fabricación elevada y un alto precio, el Avanti entró en la categoría de los automóviles americanos de lujo. Su producción casi anecdótica, empezó con 45 unidades en 1965, en 1966 catorce coches más, y en 1967, 66. Un año después, se redondeó la cifra a 100 unidades, para 1969, 92 y en 1970 se superó la cifra del año 68, 117 deportivos salían de las cadenas de montaje, en el 71, se bajaba a 107, y en 1972, se llegaba a la cifra record de 127 coches.

Para 1973, se realizaba el primer cambio estético significativo del Avanti, se introducían los nuevos paragolpes según las nuevas normas vigentes para aquel año, (norma que por cierto arruinó tantas y tantas líneas de diferentes coches de aquellos años), y la caja de cambios pasó a ser una del tipo automático procedente de la G.M.

El coche tenía su mercado muy bien posicionado tanto en el vehículo nuevo como en el de segunda mano, y en 1976, la producción aumentaba hasta 156 unidades.

Pero un hecho inesperado vino a conmocionar la fábrica, Nate Altman, el salvador del modelo, fallecía repentinamente. Un grupo de catorce personas, tomó el relevo de Altman, entre ellos su hermano Arnold, más no estaban motivados como lo había estado Nate, y tras tres años de cierto estancamiento, la empresa se vendió a Steve Blake. Ëste, renovó Avanti Motor Co., de arriba abajo, vigiló los diferentes departamentos, animaba a los trabajadores a entregarse a la faena y les subía el sueldo. En cuanto al Avanti en cuestión, prácticamente, lo único que realizó fue la supresión del añadido “II” del nombre, pintar los parachoques del mismo color que la carrocería, rediseñó el interior y cambió la instrumentación del salpicadero. Y, ocurrió el milagro, en vez de acabar agonizando como otros muchos modelos, el Avanti resurgió alcanzándose cifras respetables de producción; 195 unidades en 1981, 188 para el 82 y 276 para elaño 1983, no estaba nada mal para un coche deportivo diseñado deprisa y corriendo, a principoios de los sesenta.

En 1984 se le dotó del motor del Chevrolet Camaro. Un 8 cilindros que daba 190 hp. Con lo que el Avanti rozaba los 200 Km/h.

Blake, al ver la resopuesta que tenía el público, se embaló con el Avanti, preparando un nuevo bastidor, frenos de disco, e introdujo, un nuevo modelo, un descapotable, teniendo previsto llegar a las 1000 unidades año.

Los precios se dispararon hasta los 30,000 dólares en la versión cerrada y 40.000 dólares en la abierta. Por ese dinero se ofrecía un diseño exótico, el mejor equipo de asientos Recaro, un radiocassete Blaupunkt, un volante de cuatro brazos tapizado en cuero, caja de cambio automática y aire acondicionado. Aparte del equipo Standard, el posible cliente, podía dotar a su Avanti de una gama de accesorios muy amplia, aumentando por consiguiente el precio final el coche hasta límites insospechados, a cambio se podía escoger el interior y el color de la carrocería.

Pero los sueños, sueño son, y al final Steve Blake, tuvo que enfrentarse a la realidad. Las fuertes inversiones que se realizaron para lanzar el nuevo modelo, propiciaron el desequilibrio financiero de la pequeña empresa, llegando a tener problemas. Peró llegó el uevo salvador, Michael Nelly, que era originario de South Bend, población donde salían los Studebaker, creando una nueva empresa la “New Avanti Motor Corporation”, solventó los problemas y recogió las riendas de la marca.

Al poco timpo, José Alfaro, de Ohío, aportó capital al nuevo fabricante del Avanti. Esta aportación económica, permitió aumentar la producción e incluso plantearse un nuevo modelo, un Avanti de cuatro puertas sobre un chasis alargado, Pero a pesar de que se pensaba vender estos coches en el mercado japonés y el europeo, lo cierto es que en 1991, lla “Avanti Automotive Corporation”, no era más que una división más del imperio Alfaro, estando en venta.

Como datos curiosos sobre el recorrido, de los Studebaker Avanti y los Avanti, en la historia, podemos apreciar que su vida se escinde en dos periodos muy claros, uno, mientras pertenece a Studebaker, esta considerado, en la “Encyclopedia of American Cars” , como un modelo más de esa marca, y a partir de que el modelo pasa a manos de Nate Altman, pasa a tener vida propia como marca, siempre usando como referencia el libro antes mencionado, cerrando definitivamente el capítulo del Avanti en 1991, con quince unidades producidas, Fue un largo sueño.