SIVA (Società Italiana Vendita Automobili) - (1.967 - 1.969)



Esta marca no tiene nada que ver  con la “Società Italiana Vetture Automobili” (SIVA), fundada en Milán en 1907 por el ingeniero Silvio Barison, y que a pocos meses de su fundación desapareció. En 1922, Silvio Barison diseñó un motor rotativo que patentó y con la ayuda de algunos inversores, ese mismo año fundó en la localidad de Liborno la empresa “Fabbrica Automobili Barison & Cie.”. Sólo construyó un coche completo equipado con un motor de 4 cilindros. En 1925 fabricó 20 unidades más pero sin carrocería. La empresa fue finalmente adquirida por la compañía “Montano”, una empresa dedicada a la industria metalúrgica que no tenía interés en la industria automotriz.


Un poco de historia

Con la intención de presentar su proyecto a Iseglio Domenico, exdiseñador de Bizzarrini y de Bertone, y reciente fundador y propietario de Stile Italia, Achille Cándide, descendiente de una familia de empresarios de Puglia y dueño de un concesionario Ford en la localidad italiana de Lecce, se presentó en el Salón de Turín de 1966. Achille Cándide le mostró una carpeta de dibujos que describían el diseño de un coche que tenía en mente y que quería construir. Era un coche deportivo de dos plazas con motor trasero y un bajo centro de gravedad. Un coche ligero y divertido, dirigido a un público joven.

A Iseglio Domenico le gustó el proyecto y se puso a trabajar inmediatamente. Contrató a Moretti (antes "Abarth") para el diseño de la estructura y a Virginio Conreria para la preparación del motor, y comenzó a preparar toda la documentación para llevar a cabo el proyecto. Ofreció el coche a Ford, para que lo comercializara a través de su red de concesionarios y comenzó negociaciones con inversores financieros y los bancos. Ford deseaba completar su gama con algún modelo deportivo dirigido al público joven y aceptó de buen grado, empezando por suministrar los motores que se montaban en el "Taunus 20 M".

Fue así como finalmente y tras llegar a preacuerdos de financiación con algunas entidades bancarias fue fundada la “Società Italiana Vendita Automobili” (SIVA), con el objetivo de construir 300 coches en 1969 y otros 500 en 1970.

Justo antes del verano de 1966 comenzó la construcción de los primeros prototipos, con un moderno chasis, coronado por una carrocería ligera de aluminio. El motor suministrado por Ford, era un 6 cilindros de 2000cc, que desarrollaba inicialmente 85hp, pero que después del "tratamiento" de Conreria, desarrolla 145hp. Un motor perfecto para un coche que apenas pesaba 850 kilogramos.

Se trabajó febrilmente para poder tener los prototipos listos para la Exposición de Turín de 1967, donde se hizo una presentación estática en la exposición y se cedieron varios prototipos a la prensa especializada para que los probara en el Circuito Valentino.

El coche, denominado "Sirio" (el nombre de la estrella más brillante), recibió una gran respuesta por parte del público y de los especialistas, y consiguió un importante número de pedidos.

Durante los primeros meses de 1968 se optimizaron y mejoraron los prototipos, al tiempo que se preparó la estructura productiva de la pequeña serie que estaba planificada. Por desgracia, la retirada repentina del proyecto de quienes lo tenían que financiar, malogró el proyecto e imposibilitó el inicio de la producción. SIVA cerró sus puertas a principios de 1969.