RIEJU - (1.955 - 1.957)



Un poco de historia

En 1934, Luis Riera y Jaime Juanola decidieron asociarse para fundar una fábrica en la localidad de Figueres (Girona), que se dedicaría a la fabricación y distribución de recambios y accesorios para bicicletas. De la fusión de sus apellidos surgió el nombre RIEJU.

Empezaron con la compra de terrenos para la construcción de la nave, pero llegó la guerra civil y el gobierno republicano les incautó la nave todavía sin acabar, y que serviría de parque móvil de camiones. Como anécdota se puede comentar que, en el transcurso de la contienda bélica, el gobierno levantaría un piso sobre la planta ya edificada y que una vez finalizada la guerra sería considerado un pago de intereses al devolver las instalaciones a sus propietarios.

Posteriormente, y tras la guerra civil, RIEJU se constituyó como sociedad limitada en 1940, siguiendo con la fabricación de accesorios para bicicletas.

El 5 de enero de 1942, se constituyó oficialmente la sociedad ante notario (el padre del conocido pintor Salvador Dalí), con un capital social de 1.000.000 de pesetas, siendo presentado el proyecto de puesta en marcha de la fábrica en la Delegación de Industria. La fábrica, con un total de 35 empleados, producía 125 bicicletas a la semana.

Muy pronto se empezaron a fabricar bicicletas completas y en 1948, coincidiendo con la ampliación de sus instalaciones, se anunció la producción de motores auxiliares para bicicletas. La fabricación de los motores sin embargo no se pudo acometer hasta pasados dos años, en 1950, y no fue hasta 1952 cuando salió de la fábrica el primer ciclomotor completo.

La creciente demanda en aquella época de motocicletas de mayor ciclindrada, orientó a RIEJU a utilizar los motores franceses A.M.C. de 125cc y 175cc, que se utilizaban para la marca GIMA. Tras acordar con ambas empresas la fabricación bajo licencia de sus productos en la planta de Figueres, fueron presentadas en la Feria de Muestras de Barcelona las primeras motocicletas de 175cc y 250cc. Los motores, no obstante, no fueron construidos por RIEJU, sino por FITA, otra empresa de la misma localidad.

Al año siguiente, en el mismo certamen, RIEJU expuso los dos modelos anteriores y una nueva motocicleta de 175cc versión Sport, acompañada de un triciclo con caja de carga delatera e idéntico propulsor, del que la marca confiaba fabricar 400 unidades anuales.



Las ventas en el sector de las tres ruedas no despegaban y los microcoches estaban ganando popularidad, por lo que en 1955 RIEJU presentó un vehículo de tres ruedas con frenos de tambor, que aprovechaba la parte mecánica del triciclo de carga, un motor trasero monocilíndrico de cuatro tiempos A.M.C.-FITA de 170cc y 8,5hp a 6000rpm, con culata de aluminio y refrigerado por aire forzado. La transmisión era trasera y por cadena, con embrague de discos múltiples en baño de aceite, y cuatro velocidades. Suspensión independiente en las ruedas delanteras y de tacos de goma en la rueda trasera. Estaba equipado con una carrocería tipo berlina de turismo de dos puertas y estilo ovoide, con capacidad para dos personas. Si bien es cierto que el ejercicio de diseño no era espectacular, sus grandes ventanas acristaladas ofrecían una excelente visibilidad. Las dimensiones del vehículo eran 2640mm de largo, 1050mm de vía y 1900mm de batalla, y el consumo anunciado era de 2,5 litros cada 100 kilómetros.



Más tarde RIEJU fabricó otro prototipo, esta vez descapotable, pero ninguno de esos microcoches llegaría a ser producido en serie.