LOHNER (Lohner-Porsche) - (1.898 - 1.906)



Los primeros Lohner - "Egger-Lohner" y el "P1"

Entre 1898 y 1906, la empresa "Jacob Lohner" (propiedad de Ludwig Lohner), produjo en Florisdorf, Viena, Austria (que por aquel entonces formaba parte del Imperio Austro-Húngaro) diversos coches eléctricos. Lohner tenía aversión hacia los automóviles de gasolina accionados por motores de explosión que empezaban a funcionar por los caminos porque consideraba que eran demasiado groseros, sucios y ruidosos para sus clientes de la aristocracia.

En 1898, Ludwig Lohner, el dueño de la "Jacob Lohner" conoció a un estudiante de la Escuela Técnica Imperial de Reichenberg que había aprendido y experimentado con joven entusiasmo con la electricidad como energía propulsora y que se había formado trabajando en la empresa de componentes eléctricos "Vereinigte Elektrizitäts AG" propiedad de la familia Egger. Ese técnico de 25 años de edad era nada más y nada menos que Ferdinand Porsche. Tras hablar con el joven Ferdinand Porsche, Ludwig Lohner se convenció de que la era de los coches tirados por caballos había llegado a su fin.

En asociación con las empresas de la familia Egger y al objeto de garantizar el éxito del proyecto, Lohner empleó como técnico principal a Porsche. Porsche diseñó para Lohner sus primeros coches eléctricos, que fueron bautizados como "Egger-Lohner" (ver historia), entre los que cabe mencionar el modelo C2 Phaeton, también conocido como "P1" por ser el primer coche atribuido principalmente a Porsche. Ferdinand Porsche quiso asegurarse de ser acreditado por su diseño, por lo que grabó en todos los componentes de ese vehículo el código "P1" (que significaba Porsche nº 1). El 26 de junio de 1898, Porsche salió con el "Egger-Lohner" o "P1" por las calles de Viena. El 28 de septiembre de 1899, Porsche pilotó el "Egger-Lohner" o "P1" en la carrera de Berlín y ganó la medalla de oro, cruzando la meta 18 minutos antes que el segundo coche. El coche diseñado por Porsche también fue premiado en pruebas de eficiencia registrándose como el vehículo de menor consumo de energía en tráfico urbano.

El "Egger-Lohner", modelo C2 Phaeton, o "P1", era de hecho un vehículo de cuatro plazas que funcionaba con un motor eléctrico. Ese motor eléctrico podía producir una potencia de 3 hp a 350 rpm, y durante cortos períodos de tiempo, hasta 5 hp a una velocidad máxima de 35 km/h (sobrecargándolo). El coche podría ser conducido entre tres y cinco horas con una autonomía de aproximadamente 49 millas. Utilizaba una compleja serie de engranajes y se conducía utilizando un regulador de 12 velocidades, de las cuales 6 eran de avance, 2 eran de marcha atrás, y 4 para frenar el coche.

Por el diseño del chasis, el "Egger-Lohner" o "P1" podía ser utilizado como coche descubierto o coupé, durante el verano o el invierno o en días soleados o lluviosos. El coche estaba construido principalmente de madera y pesaba 2.977 libras con la batería. Las ruedas también estaban hechas de madera y estaban rodeadas de neumáticos. El "Egger-Lohner" o "P1" fue presentado en el Salón Internacional del Automóvil de Berlín y ganó el primer premio.

El "Egger-Lohner" o "P1" desapareció durante 112 años pero en 2014 fue localizado en un almacén en Austria, donde había permanecido intacto desde 1902. El "Egger-Lohner" o "P1" ha sobrevivido en buen estado y el motor todavía funciona, sin embargo las baterías y los asientos han desaparecido. Actualmente se exhibe en el Museo Porsche de Stuttgart, Alemania.



Otro modelo "Egger-Lohner" que se conserva es el C14 que se conserva en el Museo de la Técnica de Viena.



Lohner-Porsche

Las ideas brillantes son generalmente las más simples, y éste fue el caso del sistema de propulsión ideado por Porsche para un nuevo vehículo eléctrico de Lohner. Porsche, desarrolló un sistema de impulsión basado en instalar un motor eléctrico en cada una de las ruedas delanteras, sin transmisiones, de manera que sus rotores dieran la vuelta con las ruedas, y estos fijados por un eje rígido a la suspensión. Por lo tanto no había necesidad de ejes impulsores, de transmisión, de engranajes, de correas, de cadenas, o de embrague, debido a su simplicidad extrema, sin las pérdidas producidas por la fricción mecánica. Los vehículos de este tipo fueron conocidos como Lohner-Porche.

El Lohner-Porsche que integraba 4 motores eléctricos en los respectivos bujes de las ruedas fue exhibido en la exposición de París el 14 de abril de 1900 atrayendo la atención internacional. El mismo Ferdinand Porsche hizo un viaje de demostración con el nuevo vehículo desde Versalles hasta la exposición, que le valió un gran premio. Las ventajas de ese vehículo eran la supresión total de vías de transmisión y la minimización del desgaste mecánico.

Los Lohner-Porsche fueron puestos en producción al poco tiempo. Las ruedas tenían radios de madera con un diámetro de 650 mm en las ruedas delanteras y de 950 mm en las posteriores. El coche pesaba una tonelada, atribuible en su mayor parte a la batería, que pesaba 410 Kg., y a las ruedas delanteras y los motores que, con sus rotores, pesaban 110 Kg. cada una.

El éxito de innovación de su diseño catapultó a la fama a Porsche como ingeniero, mientras que Lohner recibió pedidos para producir más de 300 coches.

Porsche consideró siempre que la competición era una buena manera de probar y mejorar sus diseños del tal modo que el mismo año 1900 construyó coches de carreras en Florisdorf con motores eléctricos. En uno de ellos, sólamente las baterías pesaban 1800 Kg. Porsche entregó personalmente este coche a su comprador, E.W. Hart, conduciéndolo él mismo a Luton, en el norte de Londres, alcanzando en el trayecto una velocidad de 60 Km/h.

Dependiendo de su diseño, equipo y motor, el Lohner-Porsche tenía un precio que oscilaba entre las 10.000 y las 35.000 coronas austriacas, precio que superaba con creces el coste de un coche con motor de combustión, por lo que los ricos, los famosos y los aristócratas fueron sus principales clientes. Personajes como el magnate vienés Julio Meint, Margrave Sandor Pallavicini, Emil Jellinek (padre de Mercedes y agente de Daimler en Niza), la Compañía Panhard-Levassor, el principe Egor von Fürstenberg, el pionero Ludwig Stollwerk y el barón Nathan Rotschill, eran propietarios de coches Lohner-Porsche.

Lohner también produjo en serie un número determinado de coches eléctricos híbridos, con motor de gasolina y un generador para producir electricidad para los motores eléctricos. Aunque la tecnología era fiable, no podía competir en costes de producción con los coches de gasolina convencionales, y en 1906, sintiendose un hombre rico, vendió su patente a Emil Jellinek. A partir de 1906, y durante varios años, Lohner produjo autobuses bajo el nombre Lohner-Stoll.


Para las misiones al espacio del Apolo, la NASA utilizó este concepto del motor eléctrico para conducir su vehículo lunar. La invención del profesor Ferdinand Porsche todavía se utiliza actualmente, la compañía eléctrica "Hidraulico-Quebec" de Canadá, presentó y exhibió un vehículo eléctrico con un sistema de transmisión desarrollado con la tecnología inventada por Porsche. Varias compañías internacionales del automóvil también se están aprovechando de esta idea de Porsche en sus proyectos de desarrollo de vehículos ecológicos.