La empresa yugoslava IMV (Industrija Motornih Vozil) fue fundada en 1954 con el nombre de “Moto Montaža”. Esta empresa se dedicó Inicialmente a producir bajo licencia furgonetas alemanas DKW.

En 1958 la empresa fue reorganizada y adoptó el nombre de IMV para producir sus propios vehículos equipados con motores DKW.

A mediados de los años 1960 se exportaron varias furgonetas IMV 1000 con motores de dos tiempos a Checoslovaquia. Esas furgonetas fueron utilizadas principalmente como ambulancias.

Entre 1967 y 1972, IMV colaboró con BLMC y entre 1974 y 1992 colaboró con el fabricante de automóviles francés Renault para ensamblar los modelos R4, R12, R18, R5 y Clio.

Basándose en el  Zastav AR-51, IMV desarrolló también un vehículo militar 4x4 denominado IMV 0.75.

La producción de vehículos con la marca IMV se interrumpió en 1992 al ser reorganizada de nuevo la empresa y cambiar su nombre por el de “Revoz” (Renault Vozila).

Tras la desintegración de Yugoslavia, la empresa quedó establecida  en Eslovenia.