La pasión por los automóviles y los innegables medios económicos de los que disponía, llevaron a Michel Hommell, fundador de la revista “Échappement” (una de las revistas de automovilismo más importantes de Francia), y cabeza visible de un importante grupo de prensa, a fabricar sus propios coches. Para ello creó en 1994 la firma “Automobiles Michel Hommell” y contó con la inestimable colaboración de Gilles Dupré (antiguo miembro de la redacción de l’Auto-Journal) y de todo el equipo de redacción de su propia revista “Échappement”.

La modelo Berlinette Echappement, un coupe de dos plazas diseñado por el estilista Eric Dupeau, fue el fruto de ese proyecto, y estaba pensado para disfrutar del placer de la conducción sin demasiadas concesiones a la comodidad. Estaba equipado con la mecánica del Peugeot 405 Mi 16, y una caja de cambios de 6 velocidades. Un bastidor tubular soportaba la carrocería de polyester firmada por Erick de Pauw.

El precio de salida… nada más y nada menos que 350.000 francos. El Hommell Berlinette recorría un kilómetro de salida parada en 27,5 segundos y alcanzaba una velocidad máxima de 230 Km/h.

En 1995 fue presentada una versión de competición tipo Barqueta, y en 1997 Sbarro, por encargo de Michel Hommell y de Gilles Dupré, presentó una propuesta basada en el Hommell Berlinette.