F.W. Frantz, había fracasado en su intento de establecer un negocio de automóviles en la localidad de Akron, y en 1902 se trasladó a Sandusky, Ohio, para buscar capital para su empresa. Varios hombres de negocios estuvieron interesados en su proyecto y fundaron la “Sandusky Automobile Company”.

En verano de 1902 empezó la producción de los coches Sandusky (ver historia) con varios modelos eléctricos y de gasolina, pero enseguida empezaron los desacuerdos entre los socios y a finales del año 1903, otro grupo se hizo cargo de la misma.

Los nuevos propietarios reorganizaron la Compañía recapitalizándola con un fondo de 150.000 dólares y empezaron a fabricar y comercializar los coches con el nombre de “Courier”. Enseguida se inició la producción de una primera serie de diez coches que se pusieron a la venta al precio de 700 dólares.

El modelo Courier de 1904 era ligeramente más grande que el modelo anterior. Estaba equipado con un motor monocilíndrico de gasolina de 4 hp horizontal, refrigerado por agua con circulación natural sin ninguna bomba. La carrocería era de tipo Runabout, con un capó redondeado situado en la parte delantera, y tenía un único faro de bronce en el centro. El centro de gravedad era muy bajo. La potencia se transmitía a los ejes traseros mediante dos cadenas. Este sistema era muy eficaz ya que si una cadena se rompía, la otra permitía continuar la marcha hasta llegar a un taller. El peso del coche era de 600 libras, y se comercializaba al precio de 800 dólares.

Desafortunadamente la compañía no tuvo éxito y la declaración de quiebra llegó a finales de 1904. La compañía aguantó durante unos meses, pero finalmente sucumbió.