George Constantinesco, un ingeniero de origen rumano, nacionalizado en Inglaterra en 1916, conocido por su invento de una ametralladora sincronizada para aviones, inventó en 1922, un convertidor de par mecánico muy ingenioso que instaló en el bastidor de un coche.

En 1924 construyó un prototipo con componentes GN y un motor Blackburne de 350cc.

En 1925, construyó en Francia un coche equipado con un motor bicilíndrico de dos tiempos y 494cc diseñado por él mismo, al que le incorporó su convertidor de par (entre los cilindros). El convertidor, que sustituía la caja de cambios y el embrague, había sido fabricado en sus locales de Wilton Road, en Inglaterra. Este coche era capaz de alcanzar los 56 Km/h (35 mph).

El coche fue expuesto y presentado en el Salón del Automóvil de París de 1926. Entre 1926 y 1928 tan sólo se produjeron algunas unidades, porque al parecer, dicen las malas lenguas, que el convertidor jamás funcionó correctamente.