Los inicios de Giovanni Battista Ceirano

Los hermanos Ceirano (Giovanni Battista,  y Matteo), fueron figuras significativas en los años de la emergente industria italiana del automóvil.

El hermano mayor, Giovanni Battista fundó en Turín en 1866, la primera compañía que llevó su nombre para construir bicicletas.

En 1898 se renombró a la Compañía “Ceirano y C” y al año siguiente, en 1899 apareció el primer coche, un diseño de Welleyes de 2 cilindros y 3,5 hp.

Ese mismo año, Giovanni Ceirano vendió su compañía a un grupo de inversores que fundaron la “Fabbrica Italiana Automobili Torino” (FIAT) (Ver historia).

La relación con su hermano Matteo

Giovanni Battista Ceirano, permaneció en la nueva compañía (FIAT) alrededor de un año, después de lo cual y, junto con su hermano Matteo, fundó una nueva compañía “Fratelli Ceirano”, también en Turín.

En 1903, Matteo dejó la Compañía y fundó “Matteo Ceirano y C”, situada en la misma calle. En 1904 Matteo renombró su compañía “Matteo Ceirano y C - Vetture Marca Itala” (Ver historia ITALA), más popularmente conocida como “Italia”. Finalmente, Matteo salió de esta última compañía al año siguiente en 1905 para crear, junto con Michele Ansaldi, una compañía llamada “Ceirano-Ansaldi” que finalmente condujo en 1906 a la formación de SPA-Societa Piemontese Automobili Ansaldi Ceirano, renombrada en 1908 SPA-Societa Ligure Piemontese Automobili (Ver historia SPA).

Desde 1903, las vidas empresariales de los 2 hermanos transcurrieron por separado.

SCAT (1906-1923)

Volviendo al hilo la marca “Ceirano”, en 1905, Giovanni Battista Ceirano renombró la compañía “Fratelli Ceirano” que había fundado con su hermano Matteo, y le puso el nombre de “Fabbrica menor Torinese Automobili”.

En julio de 1906, también en Turín, y dejando a tras la “Fabbrica menor Torinese Automobili”, Giovanni Ceirano fundó SCAT (Societa Ceirano Automobili Torino) (ver historia). La sede de SCAT estaba situada en Vía Madama Cristina de dicha ciudad italiana.

La fábrica se activó inmediatamente (el nombre de Giovanni Ceirano era una garantía).

La compañía comenzó a lo grande, con 50 trabajadores y una producción de unos 130 coches anuales. Los primeros modelos producidos fueron el 12 hp, el 16 hp y finalmente el 22 hp de 1909.

Las victorias de 1911 y 1912 en la Targa Florio fueron una muestra de la implicación de Ceirano en el deporte del motor.

La Compañía se expandió y, en 1914, fue abierta una nueva planta con 600 trabajadores.

Durante la Guerra, Scat se vió obligada a reconvertir su producción civil a militar.

Debido a las pérdidas acumuladas, Giovanni dejó la Compañía en 1917, haciéndose cargo de ella un grupo francés de inversores (controlado por Henri Brasier, poseedor de la licencia para construir el motor Hispano-Suiza V8 para uso aeronáutico).

Este grupo francés utilizó la fábrica de Scat para producir durante algún tiempo motores de aviación. Se calcula que fueron producidos unos 1500 de estos prestigiosos motores monobloque.

Tras la Primera Guerra Mundial, Giovanni Ceirano había creado otra compañía junto con su hijo Hernesto (Ceirano SA). SCAT tenía serias dificultades financieras y de tesorería y con el tiempo, Ceirano se las ingenió para tomar nuevamente el control de SCAT, fusionándola con su otra compañía en 1923.

CEIRANO (1925-1932)

En 1925 se reinició la producción de los SCAT bajo la marca CEIRANO. El lanzamiento del Tipo 50, o “Ceiranina”, constituyó la base de la producción hasta finales de los años 20 en que aparecieron los problemas financieros.

Durante este período, apareció un coche de 4 cilindros y 1458 cc con válvulas laterales, el 150. Este coche poseía una carrocería parecida a la del Lancia Lambda. Más tarde apareció la versión 150 S.

Posteriormente apareció un modelo derivado del 150 S, el VVV, con suspensión independiente.

En 1926 fue presentado el tipo 250 de 2297 cc. Este coche fue el ultimo modelo producido.

Los problemas financieros provocaron que SCAT-CEIRANO fuera absorbida por el Consorcio Fiat en 1929, para producir en exclusiva vehículos industriales.

La producción de los viejos modelos continuó durante algún tiempo hasta 1932, año en el que Fiat decidió cesar la producción.