BRANDONE (Carrosserie Etienne Brandone) - (1.923 - 1.963)



La carrera profesional de Etienne Brandone (1893-1963) empezó como fabricante de sillas de montar. Brandone nació en Niza, y como tantos jóvenes de principios del siglo XX estaba fascinado por el fenómeno del automóvil, una fascinación que acabaría convirtiéndose en la base de una profesión.

Brandone, con 18 años, aprendió el oficio de carrocero en “Billeter & Cartier“. Tras llegar a convertirse en Jefe de Taller, Brandone decidió establecerse por su cuenta en 1923. Estableció su negocio en Cannes (Carrosserie Etienne Brandone), ciudad en la que había un montón de clientes adinerados dispuestos a pagar por la exclusividad de las carrocerías de lujo. Brandone se especializó en los elegantes coches de lujo descapotables. Su primera creación la realizó sobre un chasis Peugeot.

Su hijo Pierre (1914-1979), se asoció a la empresa de su padre en 1930, asumiendo progresivamente un papel más destacado en el negocio. Casi todos los coches que se realizaban eran creaciones únicas, y muchos de sus clientes participaban en los concursos de elegancia que se celebraban en la Riviera francesa. Muchas carrocerías fueron creadas para bastidores de marcas como Minerva, Citroen, Rolls-Royce, Delahaye, Ballot, Hispano-Suiza, Peugeot, Alfa Romeo y Voisin. Todos ellos ganaron premios en el “Concours d'Elegance” de la Côte d'Azur.

Tras la Segunda Guerra Mundial, la firma continuó trabajando sobre bastidores; Delahaye, Alfa Romeo, Talbot, Peugeot, Ford y Delahaye.

En 1952 Pierre Brandone trabajó, empleado durante 9 meses, para el carrocero inglés James Young al que ayudó en la construcción de un prototipo de carrocería de aleación ligera sobre un chasis Bentley.

"Carrosserie Etienne Brandone“ cesó operaciones tras la muerte de su fundador Etienne Brandone en 1963.