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Año: | 1.934 | |||||
Modelo: | MERCEDES-BENZ W25 | ||||||
Peculiaridades: | |||||||
Fabricante: | CMC | Refª: | M-033 | Escala: | 1/18 | ||
Ficha: |
IMÁGENES DEL COCHE REAL |
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En otoño de 1933, adelantándose varios meses a Mercedes, ya estaba listo para la competición el nuevo Auto Union, denominado P-Wagen. En enero, Auto Unión invitó a la prensa para mostrar su nuevo coche y la prensa entusiasmada lo declaró el nuevo coche de carreras alemán, hecho que a Daimler-Benz, que todavía no había mostrado su coche, no le hizo ninguna gracia.
En 1934, con el objetivo de reducir costes en la debilitada economía de los años 1930, una de las nuevas normativas limitó el peso de los coches de carreras a 750 kg.
Finalmente y para contrarrestar a Auto Unión, Daimler-Benz tuvo listo y presentó su Mercedes denominado W25. El coche había sido producido bajo la dirección técnica de Hans Niebel, con Max Wagner como jefe de diseño del chasis, Albert Heess Schilling y Otto a cargo del desarrollo del motor y el departamento experimental de Fritz Nallinger como encargado de la supervisión de la construcción y de las pruebas de los coches de carreras reales.
Rudolf Caracciola, que había competido con un Alfa Romeo en 1932 vendió a Daimler en 1.933 el coche con el que se había estrellado en Mónaco, y éste sirvió de línea de inspiración para la construcción del nuevo W25. Tras un breve debate se decidió que, a diferencia del Auto Union se adoptaría un diseño de motor delantero.
La mecánica fue confiada a un motor sobrealimentado de 8 cilindros en línea. La suspensión era independiente con brazos oscilantes y resortes helicoidales en la parte delantera, y cuartos elípticos transversales en la parte trasera. La potencia de frenada la proporcionaban frenos de tambor asistidos hidráulicamente.
En competición, hasta que no llegaron las decoraciones de patrocinadores, los coches se pintaban de acuerdo a una tabla que determinaba su color según la procedencia del equipo. Inicialmente, los coches fueron pintados de color blanco, el color alemán por excelencia en las carreras nacionales. No obstante, y de forma accidental se empezaron a utilizar coches sin pintar, de color gris/aluminio, que debido a su dominante período entre 1934 y 1939, dieron pie a la prensa para apodar a los coches de carreras de Mercedes-Benz como “flechas de plata” (en alemán “Silberpfeile”). Esta denominación se emplearía también más tarde para los Mercedes-Benz deportivos en 1954.
Como ya se ha mencionado antes, en 1934, con el objetivo de reducir costes, una de las nuevas normativas limitaba el peso de los coches de carreras a 750 kg. El Mercedes-Benz W25 estaba pintado inicialmente de color blanco, y arrojó en la balanza un peso de 751 Kg., que lo descalificaba para competir. Alfred Neubauer, por aquel entonces director deportivo, junto con su piloto Manfred von Brauchitsch, decidieron entonces arañar toda la pintura blanca de la carrocería. Al día siguiente, el coche, de un extraño color aluminio, pasó con éxito las verificaciones de peso. Tras vencer, el modelo en cuestión, acuñó el término de "Flecha de plata". Esta anécdota se descubrió tras la publicación de la biografía de Neubauer en 1958.
Los éxitos más importantes del Mercedes-Benz W25 fueron; 1934-Gran Premio de Italia (Rudolf Caracciola/Luigi Fagioli), 1934-Gran Premio de España (Luigi Fagioli), 1935-Gran Premio de Mónaco (Luigi Fagioli), 1935-Gran Premio de Francia (Rudolf Caracciola), 1935-Gran Premio de Bélgica (Rudolf Caracciola), 1935-Gran Premio de Suiza (Rudolf Caracciola) y 1935-Gran Premio de España (Rudolf Caracciola).
El ensordecedor ruido del motor hizo que la prensa lo describiera como “el coche más ruidoso de la tierra”. Inicialmente, desarrollaba una potencia de 314hp a 5800rpm, pero utilizando una nueva mezcla de combustible proporcionada por la Standard Oil, el coche era capaz de desarrollar hasta 345hp. Con el W25, una nueva era había comenzado.