WIKAL (Electro-Wikal) (1.941 - 1.950)



Las restricciones en el uso de carburantes líquidos vigentes en España entre 1940 y 1945, además de dar lugar a la proliferación de los gasógenos aplicados tanto a turismos como a camiones y autobuses, propiciaron también la aparición de algunas alternativas eléctricas.

En Madrid se fabricaron pequeñas series del vehículo eléctrico Wikal, construido sobre chasis Ford por la empresa Sucesores de Buenaventura Brutau, S.A., y oficialmente comercializado por Electro-Wikal, S.A., domiciliada en la calle Ramón de la Cruz de Madrid. La mayor parte de las unidades fabricadas, que no fueron muchas, fueron furgonetas destinadas al Parque Móvil de los Ministerios (PMM).

Esta empresa fue declarada de “interés nacional” en octubre de 1942.

La empresa Electro-Wikal, S.A. fue también la distribuidora para Madrid y alrededores del Electrociclo (ver historia), un triciclo eléctrico fabricado en Eibar por la empresa Electrociclos, S.A.

Algunas fuentes también afirman que algunos de los vehículos "Wikal" mostrados en la exposición de vehículos nacionales de Madrid de 1946, eran en realidad vehículos de la firma francesa "Sovel" (Société Véhicules Éléctriques Industriels). Electro-Wikal aseguraba poseer licencias de explotación de las patentes de Sovel.