SHAMROCK - (1.959 - 1.960)



El “Shamrock” fue un coche producido entre 1959 y 1960 en Castleblaney, Irlanda, por la “Shamrock Motors Limited”.

En 1957, William K. Curtis, un fabricante de equipos para el sector de la restauración de California, visitó la familia de su esposa en Irlanda. A raíz de ese viaje, y a la vista de la depresión en la que estaba inmerso el país, empezó a pensar en lo que podría hacer para ayudar a ese país y a sus gentes. Junto a otro hombre de negocios norteamericano, James F. Conway, fundó en la localidad irlandesa de Tralee, la “Shamrock Motors Limited”, con el objetivo de producir un modelo de coche grande de lujo para su exportación y comercialización en los Estados Unidos.

Antes de iniciar la producción, la empresa se trasladó a la localidad de Castleblayney, en el condado de Monaghan. En 1959, fue construido un primer prototipo del coche "Shamrock", que fue llevado a California para ser presentado en sociedad a través de las revistas de automóviles americanas.

El “Shamrock” estaba basado mecánicamente en el Austin A55. De él procedían el motor de 1,5 litros, la transmisión y la suspensión. La carrocería del coche, diseñada como coupe de 4 plazas y 2 puertas, con techo duro desmontable, estaba realizada de una sola pieza en fibra de vidrio y había sido diseñada por el canadiense Alvin "Spike" Rhiando, un antiguo piloto de carreras de la Fórmula 5000. La distancia entre ejes era de 2487 mm. El parabrisas era de procedencia Vauxhall.

Al poco de iniciarse la producción se hicieron evidentes graves fallos en el diseño. A pesar de que el coche era grande y pesado, se utilizaba un motor demasiado pequeño que ofrecía un rendimiento muy limitado. Otro problema era que las ruedas traseras estaban envueltas por paneles de la carrocería y una rueda trasera no podía ser desmontada (para la reparación de pinchazos, por ejemplo) sin desmontar el eje.

Enseguida, el “Shamrock”, tuvo que ser objeto de importantes modificaciones estéticas y funcionales, incluido el cuadro de instrumentos, la incorporación de una radio y la mejora de los asientos.

A pesar de las mejoras, el gran problema fue que nadie quería comprarlo. Algunos expertos afirmaron que era un coche demasiado pequeño para el mercado Americano, y demasiado americano para el mercado británico.

A pesar de que se habló de una producción de hasta 10.000 coches al año, que darían empleo a aproximadamente 2400 personas, la verdad fue al final, que en seis meses sólo se llegaron a fabricar 8 coches completos antes de que cesara la producción.

Se cree que tan sólo 4 de estos raros coches sobreviven. Tres de ellos están en Irlanda en Killarney, Thurles y Drogheda y otro en Seattle, Estados Unidos.