PENTE (1946 - 1949)



A causa de la Segunda Guerra Mundial Europa estaba arruinada. Las Fuerzas Aliadas dominaban una parte del continente, y la otra estaba dominada por las tropas soviéticas.

Ambas lados del continente europeo vivieron el apogeo y el declive de los denominados micro-coches. A raíz de la Guerra, la parte Occidental de Alemania vivía una situación similar a la de Hungría, en la que los gobiernos no daban permiso para la fabricación de automóviles, aun a pesar de que los micro-coches ya estaban en pleno apogeo.

A pesar de ello, en Hungría existieron una serie de tentativas entre finales de los años 1940 y principios de los años 1950, y una de ellas fue la del coche PENTE.

Durante la Guerra “Weiss Manfred Steel Works”, que había sido fabricante en pequeñas cantidades de coches de turismo, empezó a trabajar en el prototipo del que debería ser el Volkswagen de Hungría.

El resultado final fue impresionante: Había sido creado un coche de cuatro plazas parecido al Fiat Topolino. Lo llamaron PENTE, en honor a su diseñador J. Pentelényi.

Pentelényi era un magnífico ingeniero y se había inspirado en los pequeños coches alemanes de antes de la Guerra. Los directores de WM (Weiss Manfred Steel Works),  aprobaron el proyecto.

El PENTE se caracterizaba por su poco peso, una construcción simple con pocas piezas, fiabilidad y bajo coste de fabricación.

El primer PENTE estaba propulsado por un motor de 2 cilindros y 500cc, capaz de desarrollar 15 hp a 3600 rpm. Estaba situado delante del eje trasero. No utilizaba refrigeración por agua para aligerar el coche y simplificar el proceso de refrigeración. No disponía de arrancador en los proyectos originales, no obstante el prototipo utilizaba uno.

El peso del coche era de 400 kilogramos, según documentación de la época. El prototipo pesado solamente 5 kilogramos más. Las dimensiones aproximadas eran; 3000mm de longitud, 2000mm de distancia entre ejes y 1300mm de altura.

Pentelényi indicó que su coche era más barato de producir que el Fiat Topolino y más fácil para fabricar. Los costes de fabricación del motor de dos cilindros, eran aproximádamente un 50% más bajos que los del motor de 4 cilindros, del Topolino.

El 2 de mayo de 1946 los proyectos consiguieron la aprobación de la fábrica y en diciembre de ese mismo año el PENTE 500 entró en producción. El PENTE 500 era capaz de alcanzar los 60 kilómetros por hora sin dificultades.

Pentelényi decidió construir una versión más grande de 600cc. Se iniciaron las fases de prototipo para producir más tarde el coche en serie, pero en 1947 las reservas húngaras de aceite se agotaron y en 1949 la forzada nacionalización de todas las fábricas húngaras marcó el verdadero principio de comunismo. El gobierno húngaro negó el permiso a WM (Weiss Manfred Steel Works) para la fabricación y en octubre de 1948 los experimentos y prototipos acabaron.

El prototipo del PENTE 600 ha sobrevivido durante décadas y ahora esta expuesto en el “Hungarian Museum of Transport“. El PENTE era un coche avanzado a su época. Algunos dicen que fue el precursor del Fiat 600 y que habría triunfado en toda Europa.

El PENTE había sido una isla en el mar dentro del escenario húngaro de la automoción de finales de los años 1940. Debido al hecho de la reciente fundación del COMECON (versión Oriental de la CE) Hungría era el único país que no tenía permiso para producir coches de pasajeros y decenas de miles de motos inundaron el país. Irónicamente estas motos fueron fabricadas en la fábrica WM (Weiss Manfred Steel Works).