GREAT LAKES - (1.984-1.987)



La “Great Lakes Motor Cars Corporation” comercializó durante apenas 4 años una réplica del conocido MG TF producido por la firma británica a principios de la década de 1950, no obstante, el origen de esa réplica no empezó con esta empresa.

Victor Replicars

Desde mediados de la década de 1970, y por un precio de alrededor de 20.000 dólares, Dan y Rich Columbo, Mike Perry y Brian Metcalfe, construían por encargo carrocerías enteras de madera customizadas para los Ford A, bajo el nombre de “Victor Replicars”. “Victor Replicars”, tenía su sede en Rochester, Nueva York.

Victor Antique Auto

En otoño de 1981, buscando diversificar el negocio, tuvieron la idea de fabricar réplicas (una de tantas, pero sin duda la mejor) del conocido MG TF producido por la firma británica MG a principios de la década de 1950. Con ese objetivo reorganizaron la empresa como “Victor Antique Auto” con sede en el número 2900 de la Avenida Monroe de Rochester, Nueva York.

“Victor Antique Auto” deseaba lanzar al mercado la mejor réplica del TF y tanto fue así que compraron un MG TF original de segunda mano, cuya carrocería estaba bien y era justo lo que necesitaban para fabricar un buen conjunto de moldes para las carrocerías del kit en fibra de vidrio y desmontaron todo el coche para obtener las medidas necesarias. El chasis sin embargo, fue construido desde cero y en muchos aspectos se introdujeron mejoras sobre el original. El conjunto fue diseñado para albergar el motor, el tren de tracción y la mayor parte de las piezas mecánicas del MG B. Las ruedas eran del mismo tamaño que el TF original, pero eran ruedas de 60 radios, y para los frenos se utilizaron los mismos discos que utilizaba el MG B. Los paneles de la carrocería estaban tan bien hechos que podrían intercambiarse con los originales y encajaban perfectamente. Incluso las bisagras de las puertas fueron encargadas a la misma compañía que había fabricado las bisagras originales para el TF. El resto del coche estaba perfectamente reproducido, el interior, el techo de lona, la parrilla, etc..., eran exactamente iguales al original a excepción del tablero que fue modernizado con un completo conjunto de instrumentos, incluyendo un indicador de llenado de combustible que el original no tenía. (El original tenía una "luz de reserva de combustible"). Pero la gran diferencia radicaba en el peso. El TF original pesaba 1930 libras, mientras que la réplica de “Victor” pesaba 1650 libras. Si a esto añadimos que el motor del “nuevo” TF tenía una potencia de 95hp (38hp más que el original) nos encontramos ante una réplica de calidad y absolutamente mejorada en su mecánica y prestaciones. Los coches en Kit estaban disponibles a un precio de 7.400 dólares y completamente terminados por 16.500 dólares, lo que no estaba nada mal teniendo en cuenta que el precio de un TF original restaurado en aquella época era de unos 20.000 dólares. Desde la parte trasera la única diferencia visible era el tubo de escape que estaba en el lado opuesto del coche original.



Great Lakes Motor Cars Corporation

A principios de 1984, la compañía fue reorganizada y renombrada como “Great Lakes Motor Cars Corporation” con nueva sede en el número 16 de Main Street  East, de Rochester. Por aquel entonces empleaba a nueve personas y estaba preparada para construir 100 kits al año. Esas réplicas del TF se fueron introduciendo lentamente en el mercado y consiguieron cierto prestigio, incluso entre la comunidad de usuarios de los MG originales. En un momento dado, "British Leyland" se acercó a la “Great Lakes Motor Cars Corporation” para construir un modelo de aniversario del TF para ser vendido en los concesionarios de Leyland. El número que querían (1.500 ejemplares) estaba mucho más allá de la capacidad de producción de la diminuta fábrica y el acuerdo nunca se materializó. Se sabe que también existió una versión (TF-V8) equipada con un motor V8. Posiblemente se trató de un ejemplar único, encargado por alguien.

Desafortunadamente, el mercado para las réplicas del TF resultó ser un nicho minúsculo, y la compañía simplemente no pudo encontrar suficientes compradores para mantener ocupados a sus trabajadores. La compañía luchó por mantenerse a flote a pesar de que las ventas bajaban y los costes aumentaban, pero en 1987, la “Great Lakes Motor Cars Corporation” cerró sus puertas y sus activos fueron liquidados. Los moldes fueron vendidos a una empresa de Canadá (posiblemente a la “Victor Replicars of Canada Limited” (1983-1989)) y poco más tarde “Naylor Brothers” comenzó a producir el mismo tipo de réplica en el Reino Unido.

Se desconocen las cifras exactas de producción, pero uno de los directores de la compañía estimó que se habían vendido 7 u 8 coches completamente montados y alrededor de 25 kits.



En 1984 habían surgido también planes para lanzar al mercado un Coupe. La empresa empezó a trabajar en el diseño, ensanchando el chasis del TF y alargándolo un poco más para que pudiera albergar a cuatro personas. El proyecto, que no pasó de la fase de prototipo, fue presentado en sociedad y recibió el nombre de “Phantom GT”. Según algunas fuentes, el prototipo es ahora propiedad de un coleccionista.