CROSS (Cross Steam Carriage) - (1.897 - 1.898)



LOS ORÍGENES

La “A. T. Cross Company” fue fundada en 1846 y es uno de los fabricantes más antiguos de instrumentos de escritura. Su primera fábrica se encontraba en la localidad de Providence, Rhode Island (EE.UU.), y se limitaba a la elaboración de elegantes cajas de oro y plata para lápices de madera. La historia de esta mundialmente reconocida marca se inicia con Richard Cross, que fundó la empresa el mismo año que nació la Institución Smithsonian, se inventó la máquina de coser, que el telégrafo de Samuel Morse llegó a Occidente y que Estados Unidos se preparaba para una guerra contra México. Richard Cross era un cualificado fabricante de bolígrafos y portaminas, y transmitió esta pasión a su hijo, Alonzo Townsend Cross.

CROSS STEAM CARRIAGE

En 1897 Alonzo Townsend Cross (hijo de Richard e inventor de la pluma taquigráfica Cross), decidió construir un automóvil de vapor experimental para su propio uso. Fue el primer automóvil fabricado en Rhode Island. La construcción comenzó en octubre de 1897 y su primera prueba fue en marzo de 1898. Sólo se construyó un ejemplar y fue concebido de manera que otros tipos de motor diferentes pudieran en el futuro reemplazar la maquinaria de vapor.

El Cross Steam Carriage llevaba dos tanques de quince galones cada uno (56,78 litros), uno para el agua y otro para el queroseno. Aunque hasta esos momentos muy pocos accidentes se habían producido por la utilización de gasolina en vehículos a motor, el queroseno era más seguro y se podía obtener en todas partes, lo que representaba una gran ventaja sobre los modelos de gasolina convencionales. Podía funcionar durante cinco horas con un tanque de agua. El coste de circulación con queroseno era de alrededor de un centavo de dólar por milla recorrida. El Cross Steam Carriage pesaba alrededor de 1.800 libras (816,4 Kg.) y podía mantener sin ningún problema una velocidad constante de diez millas por hora (16 Km/h).

Alonzo T. Cross afirmaba que se había interesado por el tema de los vehículos automóviles durante muchos años, y sus meticulosas ideas de ingeniería fueron muestra de ello. El Cross Steam Carriage superaba en prestaciones a algunos de los coches de vapor más populares de la época. Estaba equipado con un sistema de reducción de la velocidad de giro del motor y los radios y las llantas de las ruedas eran de madera. Una distancia entre ejes de 78 pulgadas (1.980 mm) y un peso total del conjunto de 2.100 libras (952 Kg.) con el motor, la caldera y el chasis completo necesitaban ser transportados de forma segura por lo que no utilizaba neumáticos ordinarios. Los neumáticos, de 38 pulgadas (960 mm) de diámetro, eran de goma sólida, fabricados por la “American Tire Company”, los cuatro costaban 100 Dólares.

Todos los elementos mecánicos del Cross Steam Carriage, incluidos los motores y la caldera, estaban situados dentro de la carrocería, la cual se apoyaba sobre tres muelles elípticos.

El Cross Steam Carriage fue construido por L. F. N. Baldwin, propietario de la “Cruickshank Engine Works”, de Providence, Rhode Island. Alonzo T. Cross, propietario de la “Cross Writing Instrument Company” fabricó el chasis. La carrocería fue fabricada por H. M. Howe, un fabricante de carruajes de la ciudad.